dimarts, 15 d’octubre del 2024

Cada jueves, un relato - Tema: “El lobo feroz” – “Yo, el lobo”

Esta semana nuestra amiga NURIA ESPINOSA desde su Blog BITÁCORA LITERARIA, nos propone como tema para el Reto Juevero de esta semana “El lobo feroz”.

Su leyenda ha sido contada a lo largo de generaciones: un ser astuto, temido y lleno de misterio. Pero ¿es el lobo realmente el villano que todos creen? ¿O detrás de sus afilados colmillos hay una historia que aún no ha sido contada?

Reimaginemos este icónico personaje. Hagamos otra versión: un depredador o una víctima, un héroe inesperado o algo más allá de la imaginación, siempre que el lobo sea el centro de tu historia.


AQUÍ podréis encontrar el resto de relatos participantes.


"YO, EL LOBO"

Imagen: Pixabay



En mi juventud fui feliz en aquellos bosques, llenos de vegetación y sonidos mágicos e inconfundibles para todos aquellos que hemos nacido en él. Vivía con mis hermanos de manada, como lo habían hecho los nuestros durante generaciones.

Pero hubo un momento en que nuestro grupo empezó a menguar. Una mañana faltaba uno de los nuestros, pasados unos días desaparecía otro, y así durante meses, hasta que finalmente me quedé solo.

Los humanos empezaron a meter sus narices en nuestro territorio, y pensaron que era un buen lugar para vivir. Como odio a los leñadores, destrozan el bosque sin piedad, todo para construir sus improvisadas cabañas que luego convierten en sus moradas para siempre. Tímidamente, construyen una aquí, otra por allá.

No aguanto a las niñas que se pasean canturreando por el bosque, despertándome de mi plácido sueño y luego tras perderse gimotean desconsoladas. No me queda otra que acompañarlas hasta los alrededores de alguna casa. No me acerco demasiado porque allí me esperan siempre en el porche con la escopeta cargada.

O las dulces abuelitas que cocinan sus pasteles de carne o tartas de manzana y las dejan reposar en la ventana, pensando que allí estarán cuando regresen. Luego se inventan cuentos e historias perversas para contar a sus nietos, como que nos comemos a los niños, o tiramos abajo sus casas resoplando.

Lo único que nos comemos alguna vez es una pieza de su ganado y cuando está mal vigilado. Pero eso no es culpa más que suya, si no se dedicaran a arrasar el bosque cazando cualquier pequeño animal que me sirve de sustento, no tendría que ir yo a sus casas a robarles el suyo. Como veis somos criaturas malditas y tras tantas leyendas negras sobre nosotros, poca cosa se puede hacer ya para limpiar nuestro nombre. Eso sí, se inventan la figura del “hombre lobo” para descargar así sus maldades en nuestro nombre. Solo espero que el día que muera el último de nosotros se lamenten mientras releen entre sollozos sus viejas y falsas leyendas. ¿A quién culparán de sus desgracias?





27 comentaris:

  1. Hola Marifelita, estupenda versión del lobo feroz que ofrece una perspectiva cargada de melancolía. En lugar de ser el villano, el lobo se presenta como una víctima del avance humano y de las falsas leyendas que se han tejido a su alrededor. Su voz, está llena de resentimiento y tristeza, al sufrir la invasión de su territorio, y la pérdida de su manada. Este es el aspecto humano en la naturaleza y el impacto destructivo que tiene, incluso en los bosques.

    Me gusta cómo también se desmontan las leyendas populares: en lugar de comerse a los niños o derribar casas, el lobo es retratado como un ser que se limita a sobrevivir en un mundo que se está destruyendo. Es una versión que invita a la reflexión sobre cómo los seres humanos solemos etiquetar como “malvados” a los animales cuando, en realidad es el círculo natural de la vida: sobrevivir.
    El cierre, con la esperanza de que algún día se lamenten de haberlos extinguido, me ha parecido una maravilla. Un abrazo

    ResponElimina
    Respostes
    1. Claro, es que la historia cambia mucho, depende de quien la cuente! Je, je! Me alegro que te haya gustado tanto mi relato! Siempre tenemos la necesidad de justificar todo lo que hacemos por un bien mayor, y en ocasiones ya no hay justificación posible! Y por supuesto, el malo de la película siempre tiene que ser otro! Un abrazote Nuria y gracias por proponernos este nuevo reto!

      Elimina
  2. Creo que te has metido muy bien en la piel del lobo y has argumentado muy bien esos valores como son cuidar los bosques y al fin y al cabo es su territorio, son los leñadores quien ocupan su espacio vital.
    Y asi pasa que casi ya no existen lobos, en la península, y los pocos que quedan a veces deben bajar al asfalto porque no tienen que comer, por la caza furtiva y otros menesteres.
    Un buen texto con mucha miga y que da que pensar.
    Un besote, feliz semana.

    ResponElimina
    Respostes
    1. Efectivamente, nos olvidamos a menudo que aquí el mayor depredador y cazador que hay en la faz de la tierra es el humano, y así nos va! Somos incapaces de admitirlo! Je, je! Un besote Campirela!

      Elimina
  3. Hola Marifelita! Me encanta como describes al lobo, yo también me he puesto este jueves un poco en la piel del lobo que tiene tantos atributos nobles que el humano a veces carece de ellos... ¿Feroz el lobo o mostruosos los humanos...? Besos por ahí!!!

    ResponElimina
    Respostes
    1. Si, supongo que solo se trata de darle la vuelta a todo aquello que hemos oído durante nuestra vida y hacer el esfuerzo de ponerse en lugar del otro y verlo con otros ojos! Sin duda los humanos siempre seremos el monstruo, pero nos resistimos a creerlo! Un abrazote Mari!

      Elimina
  4. Tu historia es realmente un llamado a la concientización, el ser humano cada vez destruye más los hábitats naturales de los animales.
    Me gustó mucho tu historia, cargada de sensibilidad.
    Un abrazo.
    PATRICIA F.

    ResponElimina
    Respostes
    1. Gracias Patricia! Es que los humanos a menudo no somos conscientes que el malo de la película somos nosotros! Je je! Un abrazote!

      Elimina
  5. Has dado vida a un lobo. Son tantas las cosas que dirían en su defensa que al final los civilizados son los animales y las alimañas nosotros.

    Un saludo de Buscador

    ResponElimina
    Respostes
    1. Si pudieran hablar, seguro que nos explicarian aun más agravios! El suyo es un sufrimiento en silencio! Un abrazote!

      Elimina
  6. Como comentaron, te metiste bien en la piel del lobo.
    Y lamentablemente, lo que argumenta tiene mucho de real. Los humanos han ocupado ese lugar, ídilico para los lobos, a quienes acusaron de las desgracias humanas.
    Magistral. Besos.

    ResponElimina
    Respostes
    1. Aqui el lobo reivindica su derecho en la naturaleza, cuando prevee que ya esta todo perdido! Me alegro que te haya gustado tanto! Un besote Demi!

      Elimina
  7. Este es un lobo crepuscular, que no llegará a su fin como se teme, pero wue puede que sí deje de ser un lobo salvaje, para convertirse en uno, sino domesticado, sí casi casi mantenido. Como aquellos indios en sus reservas, también víctimas del poder.
    BesZooo, amiga

    ResponElimina
    Respostes
    1. Ya dicen que si no puedes con tu enemigo, únete a él! Es la única salida que posiblemente le quede a nuestro amigo! Un besote Gabi!

      Elimina
  8. Buen relato. Una visión desde la perspectiva del lobo muy origina. Me gusta! Un abrazo!
    lady_p

    ResponElimina
    Respostes
    1. Gracias Lady_p! Es que la versión del lobo tambien es importante para entender mejor el cuento! Je je! Un abrazote!

      Elimina
  9. Tu relato explora la condición de víctimas que también puede afectar a los lobos. En su terreno se pueden ver invadidos por la actividad humana y así nos va a todos.
    Me ha gustado tu aportación, muy original.
    Saludos.

    ResponElimina
    Respostes
    1. Gracias Marcos! Supongo que en tiempos pasados su presencia complicaria la vida a muchos humanos! Pero es que quizá los lobos estaban antes verdad? Je je! Un abrazote!

      Elimina
  10. Cuánta sabiduría hay en ese lobo! Muy bueno, Marifé. Un abrazo

    ResponElimina
    Respostes
    1. En la naturaleza hay mucha sabiduria! Tendriamos que escucharla más! Un abrazote!

      Elimina
  11. Lobo estás?, ya no, permanece escondido en el bosque que fue convertido en estepa, se alimenta de niñas... no, se alimenta de lo que las niñas le ofrecen a cambio de volver a casa.

    ResponElimina
    Respostes
    1. Esa sería una versión más a tu estilo! Je je! Un abrazote!

      Elimina
  12. Me ha dejado pensando esa ultim frase...y cuNDO Y n

    ResponElimina
  13. Perdón..pisé mal y se fue el comentario a medias..quería decir...y cuando falten a quien le echará la culpa el hombre?----o sea..el hombre, porque las mujeres no somos asi...jajajjaja mentiran es broma..es que ya se me fue la idea al cortarse el comentario..besosososos

    ResponElimina
    Respostes
    1. Ja ja! Ya veo que te dio guerra el teclado! Ja ja! Pues si, despues de muchas acciones vienen los lamentos, pero el mal ya no se puede deshacer! Un besote Diva!

      Elimina
  14. ¡Hola, Marifelita! Magnífico alegato en defensa del lobo al que me sumo. Yo también me pregunto qué ocurrirá cuando animales tan nobles como el lobo desaparezcan de nuestro mundo. Lo lamentaremos muchísimo, pero será tarde. Muy bueno.
    Saludos. AlmaLeonor_LP

    ResponElimina
    Respostes
    1. Creo que ahora somos incapaces de ver la repercusión que tendría en el ecosistema la desaparición de algunas especies. Tanto grandes como pequeñas, mansas como salvajes, todas aportan su parte de equilibrio en la naturaleza! Solo tenemos que esperarnos y observar! Un abrazote!

      Elimina

Microrreto Noviembre "El Tintero de Oro" - Tema: El personaje y su entorno - "Invisible"

Para este mes de Noviembre, los amigos de EL TINTERO DE ORO nos proponen el siguiente microreto desde su blog: Consistirá en escribir un mi...