Para el reto juevero de esta semana, nuestra compañera MYRIAM desde su Blog DE AMORES Y RELACIONES, nos propone crear un relato en el que presentemos un crimen y 3 pistas. En cada caso nos da tres opciones a escoger:
LA FIRMA
Esa
tarde me dejaron nota en comisaría de que se había cometido un crimen en el
otro extremo de la ciudad. Me asignaron el caso y requerían mi presencia para
revisar la escena del crimen. Antes de salir de mi despacho tomé mi medicación,
llevaba unos días con la mente algo confusa, definitivamente necesitaba
urgentemente unas vacaciones.
Al
llegar al lugar del crimen en un barrio trabajador a las afueras de la ciudad,
me encontré con una modesta tienda de menaje y otros artículos de hogar. Descartamos
enseguida el robo como móvil. La caja registradora estaba intacta, ni siquiera
se habían llevado su bolso, su móvil o cualquier artículo de la tienda, todo
parecía estar en su sitio. No había signos de violencia.
Al
acercarme a la víctima, una mujer de mediana edad, estirada en el suelo tras el
mostrador, comprobé que el arma utilizada para matarla era un cuchillo. Demostraba
que se trataba de un acto pasional, nada premeditado. Alguien cercano a la
víctima, posiblemente alguna expareja cabreada o bien alguna antigua amistad
despechada fue a visitarla a la tienda, discutieron acaloradamente y la
situación se descontroló. En los tiempos que corren estas cosas pasan con
demasiada asiduidad, la gente anda demasiado crispada hoy en día. En un momento
pierden la cabeza y comenten una barbaridad.
Especulamos
sobre quién podría haber cometido el crimen y empezamos a confeccionar una
lista de posibles sospechosos para iniciar una tanda de interrogatorios. Uno de
mis agentes me llamó para que me acercara al otro lado de la tienda, quería
mostrarme algo. Noté en él una expresión de sorpresa, nerviosismo y cierta
confusión en su rostro.
Al
acercarme a él, con voz temblorosa y tras aclararse varias veces la garganta
ruidosamente, me comentó que al parecer el asesino había dejado una nota en el
lugar del crimen e incluso se había atrevido a firmarla. Al pasarme la nota y
empezar a leerla, la letra me pareció extrañamente familiar. Al finalizar y ver
la rúbrica al pie de la carta, contuve el aliento, volví a releer la nota de
nuevo. Perplejo y sin saber que pensar dije en voz alta:
—¡No puede ser, pero si ésta es mi firma!
El final es total, pero si subimos al principio ya nos dice que esta tomando medicación y la mente la tiene confusa, un dato a tener en cuenta, pero cuidado , puede ser una trampa.
ResponEliminaMe ha gustado mucho, presiento que este jueves vamos a tener muy buenos relatos . Gracias, besotes.
Al principio ya dejé caer una pista... je je! Si, yo también creo que esta semana el tema propuesto dará mucho juego! Un abrazote!
EliminaParece que los remedios no son adecuados o no los tomó en la forma prescripta.
ResponEliminaUn abrazo.
Si, efectivamente, algo ha fallado en su medicación! Ja, ja! Un abrazo!
EliminaTodo el relato nos va conduciendo hacia un final apoteósico. Es que hay que tomar vacaciones. No se puede trabajar sin respiro, uno termina agotado y como en este caso, pueden suceder cosas terribles estado en un estado de confusión y delirio. Excelente relato, Marifelita. Mil gracias por haberte sumando a mi convocatoria. Besos y abrazos.
ResponEliminaLa verdad es que una buena salud mental es vital y para ello, un buen descanso es imprescindible! Gracias por tu interesante reto juevero Myriam! Un abrazo!
Elimina*estando en un estado, digo
ResponEliminaEl final es brutal *.* ¡No me esperaba para nada ese giro de acontecimientos! El pobre investigador va a tener que dar muuuchas explicaciones...
ResponEliminaUn besazo juevero, Marifelita
Si! Al detective se le complicado un poco el dia! Je,je! Un besote!
Elimina¡Hola, Marifelita! Me encantó cómo has utilizado eso que llaman la pistola de Chejov. En el caso de este relato con esa medicación que al final nos damos cuenta que es clave en la historia. Sin duda que descubrir que uno es culpable de una atrocidad debe ser algo inenarrable. Fantástico relato detectivesco. Un abrazo!
ResponEliminaGracias! Pues no conocia el concepto de "pistola de Chejov", pero me lo apunto! Ja ja! Encontrarse en una situación así realmente debe resultar tremendísimo! Un abrazote!
Eliminay ahora qué? aguacil aguacilado ? y es que vivimos tiempos de locura Un abrazo
ResponEliminaUna pizca de locura es recomendable, aunque demasiada ya nos puede complicar la vida, verdad? Un abrazo!
EliminaUn buen relato con un final apoteósico. Nos vas dejando pistas para que nos alejemos. Y al final te das cuenta de la pista de la medicación.
ResponEliminaMuy bueno.
Abrazos.
Gracias! A veces lo que parecen pequeños detalles pueden ser la clave! Ja ja! Un abrazo!
EliminaEl final me ha dejado boquiabierta, aunque la autora ha ido dejando pistas para que esto no nos sucediera.
ResponEliminaEstupendo relato.
Je je! Si es que, quien avisa no es traidor! Ja ja! Un abrazote!
EliminaHas hecho un buen uso de la pistola de cuero, que yo tampoco sabía a qué era, pero que me parece un recurso difícil de usar sin poner una flecha señalando ña palabra clave, y diciéndole al lector: " eh... mira aqui".
ResponEliminaEn cambio tú ña has usado con maestría sin saber lo qué era.
Yo por ejemplo, he pasado por la medicación sin poner mayor atención en ella. ¿Quién no se médica en ña actualidad?
Me parece wue esta vez ha sobrepado la línea y se le ha acabado los días de libertad medicada.
Besoos, smiga
¿La pistola de Chejov? Todo un descubrimiento para mi en este relato! La verdad es que a nuestro detective le espera una larga temporada encerrado, donde me temo le controlarán escrupulosamente su medicación! Ja, ja! Gracias amigo, un besote!
EliminaUna mente confusa puede dar mucho juego, me gustó
ResponEliminaUn abrazo
Una mente confusa puede ser también nuestra perdición! Ja, ja! Un abrazote!
EliminaMuy buen relato y con final impredecible. Creo que sí, que necesita unas prontas vacaciones. Un abrazo
ResponEliminaSi, me temo que ahora iniciará unas largas "vacaciones", pobre! Un abrazo!
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