En el reto juevero de esta semana, de nuevo MAG como nuestra anfitriona, nos propone escribir un relato desde dentro de una pintura. Narrar una historia donde los elementos de la obra formen parte de la realidad del protagonista. Como una “Ucronía”, que se parte de un hecho ocurrido en el pasado que sea sobradamente conocido o relevante y llegado un punto, se cambia lo que aconteció o se inventan por completo. Es lo que se llamaría punto de Divergencia.
En nuestro caso, el punto de divergencia, y de donde va a partir la realidad alternativa será el cuadro que elijamos. A mi me ha impactado éste, por su fuerza y su sensibilidad.
Alfred Guillou (1892) - “Adieu”
Aquí podréis encontrar el resto de relatos
participantes en este nuevo reto.
"LA MAR"
Eres la madre que nunca tuve, la que me mecía desde niño en
su vaivén, a bordo de la barca de mi padre, dándome cobijo en tantas noches
largas y solitarias. Te convertiste en una fiel compañera, que ha estado
siempre conmigo en las mejores épocas y en los peores momentos de mi vida. Eres
mi confesora, a ti todo te lo he explicado. En aquellas largas temporadas solos
tú y yo, te conté mis pequeñas proezas, sueños inalcanzables, ilusiones
imposibles y mis dolorosos desencantos. Tú has sido con diferencia, la más
comprensiva y la mejor de las oyentes que uno pueda desear.
Has sido mi sustento y el de todos los míos, generación tras
generación, ayudándonos a regresar a todos a casa cada noche, sanos y salvos,
con abundantes capturas. Cuando me sentía prisionero, encerrado entre cuatro
paredes en tierra firme, me faltaba el aire y solo podía pensar en ti. Me
sentía deseoso de volver a tu lado, embarcarme y empezar un nuevo viaje en tu
compañía. Entre días de ruidosas y peligrosas tempestades y tantos otros de
total e inquietante calma.
La paz que me regalabas cada noche en el camastro de mi
humilde embarcación no la he sabido encontrar en ningún otro lugar del mundo.
Esa libertad que tú me dabas, como si el mundo no se acabara ni tuviera
límites, no me la ha dado nada ni nadie más que tú. Siempre me acompañaba esa
infinita esperanza como si en el próximo puerto me esperara la ansiada fortuna
o esa soñada felicidad.
Y por fin la encontré con ella. En esta frágil mujer que
ahora sujeto entre mis brazos y que tu meces en tus embravecidas aguas. ¿Quizá
no podías soportar que compartiera ahora mi futuro con ella? ¿Que os abandonara
a ti y a mi vieja barca, decidiendo probar suerte y ganarme la vida en tierra
firme? Queriéndome alejar de tus peligros veo que finalmente era mi destino
acabar entre tus aguas, en plena travesía en búsqueda de un nuevo futuro en
tierras lejanas.
Solo puedo decirte que no me arrepiento de haber escogido mi
camino en la vida y compartir cada segundo contigo. Pero ahora solo puedo
rogarte, que si nos acercaras a la costa o nos enviaras otro barco en nuestro
rescate, yo nunca te abandonaría. Volvería de nuevo a bordo de mi barca contigo
hasta mis últimos días.
Amiga mía, hoy me encuentro esperando mi destino contigo,
como no podía ser de otra forma. Algo me
dice que mi travesía acaba aquí y ahora, y tu seguirás fuerte, firme,
constante, brava y bella como siempre serás. Me abandono en tu eterno vaivén,
confesándote que, para mí, has sido, eres y siempre serás mi todo.
La mar, celosa y constante, te entrega todo, pero también puede arrancártelo.
ResponEliminaPrecioso, con un final que dentro de lo duro, lleva a la calma
Abrazo
Me gustó la idea de mostrarla como una mujer celosa. Esas son las dos caras de la moneda con la mar, o al menos dos características que la definen: tempestuosa y calmada. Un abrazo!
EliminaMe ha gustado esa profundidad que le das a la mar y sobre todo una dama celosa muy poderosa. Sensibilidad y fuerza encontrado en tu texto. Un placer leerte . Saludos y feliz semana.
ResponEliminaAsí veo yo a la mar, una fuerza poderosa. Si te atreves a adentrarte en ella tienes que ser consciente que te dejas a su caprichosa merced. Saludos!
EliminaUn mar cercano y amigo que puede también ser el peligro, la incertidumbre. Muy bien personificada cada arista de esa dualidad. Un abrazo
ResponEliminaPara quienes nos gusta la mar y la disfrutamos, también sabemos ver su peor cara, hay que tenerla siempre presenta y no olvidarla. Pero aún así disfrutar de ella. Un abrazo!
EliminaPrecioso texto, con ese rescate a una mujer que a su vez le rescata.
ResponEliminaMuy bien relatado. Un abrazo, amiga
En la vida, en un momento u otro, a todos nos rescata alguien ¿verdad? En mayor o menor medida. La vida es un rescate continuo... Ja ja! Besos!
EliminaComo la vida misma tu relato, me ha encantado la forma de narrarlo y de llegar...
ResponEliminaUn abrazo y feliz dia
Pensé en la idea del marinero que huye de los peligros de la mar, y buscando fortuna por otros medios, el destino le lleva de vuelta a la mar. No sé si logré del todo la Ucronía con ello, o fue todo lo contrario. Un abrazo!
EliminaEl mar, una fuente inagotable de ideas, y esta pintura, un pase... nunca imagine tantas versiones para un mismo cuadro.
ResponEliminaEl mar tiene algo que resulta muy inspirador para mucha gente! Quiza por ser tan primario e inmenso! Nos hace aflorar a todos sensaciones, a cada cual las suyas! Es especial! Saludos!
EliminaParece que en poco espacio de tiempo ha pasado ya la etapa de negación e "ira", y esta en plena fase de negociación, aunque ya anda cerca de dejarla atrás y estacionarse en la aceptación. También es una magnífica demostración de adaptación, independientemente del resultado.
ResponEliminaBesoss amiga
Imagina la situacion en un naufragio! Pasariamos por todas esas fases seguro, en un tiempo record, viendo tan cerca nuestro final! Ira, reproches, desesperacion y aceptacion final! Besos!
EliminaEl mar siempre se pone de parte de aquellos que lo aman , pero a veces es una amante celosa, no lo debemos olvidar.
ResponEliminaLa mar no se casa con nadie, como es tan poderosa e inmensa, se puede permitir ir a su aire, sin calcular las consecuencias! Es como una diosa eterna! No os parece?Saludos!
Eliminaes justo perder la vida de esta manera? en el mar no valen las leyes de la tierra, el mar impone sus leyes Un abrazo
ResponEliminaTu lo has dicho! La Mar impone sus propias leyes! Dueña y señora en sus dominios! Un abrazo!
EliminaMarifelita, qué texto más cargado de verdad. Has personificado el mar a la altura de la vida y has representado la imagen cómo un último aliento. Seguro que el mar, la mar,o vuelve a acoger pues siempre fue suyo.
ResponEliminaMuchísimas gracias por tu participación y por describir tanta vida en una súplica.
Un beso enorme 😚
Una súplica desesperada ante el inminente final. Como el que ruega a su dios, que aplace el momento de su muerte y agradeciéndole al mismo tiempo la vida que le ha regalado. Gracias por plantearnos este fantástico reto! Besos!
EliminaTe leí hace unos días y no pude comentarte porque algo me falló, y vuelvo y te releo, me encanta tu relato, ese amor incondicional a la mar, que todo le da y todo le quita, bello.
ResponEliminaUn abrazo grande, que tengas una linda semana.
Gracias Esther! Para él la mar lo es todo. Como una diosa, y como tú dices, que todo lo da y todo lo quita! Feliz semana para ti también! Un abrazo!
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