Mi fotografía escogida es la de la fábrica de munición, y mi microrelato inspirado en la imagen propuesta y también en una historia real:
LA FÁBRICA DE MUNICIÓN
1915 – Nottinghamshire (Inglaterra)
En el frente se quedaban sin munición y el gobierno empezó a
construir fábricas de balas y obuses por todo el país. Muchas mujeres fuimos
reclutadas como operarias en ellas, yo estuve en la National Filling Factory
nº6 en Chilwell.
El trabajo resultó ser más duro e inseguro de lo que nos
explicaron en un principio: mecanizado de casquillos, levantar y trasladar
obuses muy pesados y manejar químicos muy peligrosos. La jornada laboral era de
unas diez horas diarias sin apenas descansos y muy mal pagado. El gobierno
siempre argumentaba que era injusto pagarnos un sueldo mayor cuando otras
trabajadoras de distintos lugares hacían “trabajo de mujeres”. Llegué a leer en
un artículo de la prensa que “el salario de un hombre era para su familia, pero
el de la mujer era individual”. Nunca supe interpretar que diablos querían
decir con eso. Se dijo que llegamos a ser casi un millón de trabajadoras
industriales en la guerra, mientras nuestros padres, maridos, hermanos e hijos
estaban en el frente.
A algunas nos llamaban “las mujeres canario”, ya que nuestra
piel se volvía amarilla debido a la larga exposición al polvo de TNT con el que
rellenábamos los obuses. Entre otros riesgos que corríamos en nuestro trabajo
estaba el de ir en zuecos de madera para evitar las chispas que podrían saltar
con el metal de nuestros zapatos.
El 1 de julio de 1918 lo recuerdo perfectamente porque aquel
día no fui a trabajar. La noche anterior me la pasé tosiendo y cuando desperté
y vi mi almohada ensangrentada mi hermana me llevó a rastras hasta el hospital
más cercano para que un médico me visitara. Aquel día en mi fábrica murieron
134 personas debido a una gran explosión. Los cuerpos de 102 personas fueron
imposibles de identificar y fueron enterrados en una fosa común. Las
supervivientes, yo incluida, seguimos trabajando al día siguiente como si nada
hubiera ocurrido.
Aquel día nací de nuevo, pero en nuestras fábricas perdieron la vida muchas mujeres en silencio y sin necesidad de poner un pie en el frente.
Y si deseas leer más historias reales sobre este tema y otros igualmente interesantes os recomiendo el libro PIONERAS, de Marina Amaral y Dan Jones.
Querida amiga Marifelita, um tema duro que necessita de reflexão.
ResponEliminaEstamos vivendo muito perto de guerras no mundo e, como não as vivenciamos no outro século de perto como nossos pais, devemos pensar e sentir como muitos sofreriam toda sorte de atrocidades.
Você aqui colocou parte delas...
Um horror mesmo ser enrerradas em valaa comuns. Como ocorreu na Pandemia.
Sua participação tem todo sentido.
A escolha do tema foi de muita relevância. Outro sucesso de "jueves".
Tenha dias abençoados!
Beijinhos fraternos de paz
Hola Roselia,
EliminaEfectivamente es un tema duro pero que aunque nos parezca que nos queda lejos o no nos afecta, no hay que perder de vista. En cualquier momento nosotros podemos ser las víctimas y la historia está para aprender de ella, aunque a veces nos olvidamos! Un abrazote!
Qué buen relato nos dejas, me ha encantado ese énfasis que has puesto y el destino hizo su jugada también.
ResponEliminaAlgo se ha cambiado desde la guerra , o al menos se ha ajustado más , hoy el trabajo realizado por las mujeres en igual de condones y categorías es equitativo hombre y mujer, aunque algunos todavía deberían regularse.
Te felicito por el tema elegido para este jueves, muy bueno y estoy segura de todos los que estoy leyendo son magníficos. Un besote grande.
Hola Campirela!
EliminaHay pocas cosas que nos igualan a todos, pero sin duda la enfermedad, la muerte o la guerra lo hacen. Y en la vida como en la guerra, seguir adelante o quedarse por el camino muchas veces es solo cuestión de suerte, aunque otros muchos no la tengan. Me alegro que te haya gustado el tema escogido, aunque quizá triste y desagradable creí que podía ser interesante. Un besote y gracias por sumarte!
No entiendo el razonamiento para pagarles menos, ni aún malpensando. Tampoco les hacía falta. Con decir " porque yo mando y tú obedeces" había suficiente. O que tenían 14.horas de vacaciones diarias...
ResponEliminaSe nota que te has currado la documentación.
Por lo que se be en la foto, Podria pensarse que los obuses se plantaban y crecían de la tierra.
Besazooo amiga
Hola Gabi!
EliminaEn aquellos tiempos quizá pensaron que cualquier excusa o justificación era válida. No le dieron muchas vueltas la verdad, imagino porque sabían que no habría discusión ninguna. Es verdad que la foto parece una plantación en lugar de una fábrica, es muy curiosa. Muchas fotos de este libro me parecen geniales, por eso quise compartirlas con vosotros. Un besote amigo!
Terrible testimonio que demuestra que en las guerras no hay nada de épico. Solo muerte y destrucción
ResponEliminaHola Neo!
EliminaEstoy totalmente de acuerdo contigo. Lo épico de las guerras solo lo encontramos en el cine o en la literatura. Un abrazote!
Hola Marifelita, el destino tuvo su palabra y por ello se salvó de lo que luego sucedió. Una historia dura y profunda muy bien narrada. Un abrazo
ResponEliminaHola Nuria,
EliminaSin duda la suerte juega un papel muy importante en nuestro destino, tratándose de una guerra. Estar o no en el lugar y momento equivocado puede marcar la diferencia. Un abrazote!
Si mal no recuerdo a lo largo de la historia las mujeres han hecho los trabajos más duros y más mal remunerados, siempre consideradas menos, muy buena tu historia, para pensar en tantas injusticias.
ResponEliminaUn abrazo.
PATRICIA F.
Hola Patricia!
EliminaEs verdad que durante mucho tiempo estas injusticias quedaron ocultas. Es importante darlas a conocer aunque muchas ya se hayan rectificado. Un abrazote!
Donde hay polvora hay esas explosiones, claro si no muere uno en la explosion, los quimicos van matando de poco, intoxicando cada celula.
ResponEliminaCurioso lo del los zuecos....podrian ir descalzas....pero supongo un zueco de madera alguna proteccion ofreceria, mucho mejor que un pie desnudo.
Hola Jose,
EliminaLo interesante de recuperar estas viejas historias es descubrir los detalles del dia a dia de muchos trabajadores en aquellas épocas, y sus precarias condiciones! Un abrazote!
Hola Marifelita ahñi te envío mi participación en esta semana. Una convocatoria muy interesante. Un abrazo!
ResponEliminalady_p
https://elsuenodemorfeo.news.blog/2025/05/29/las-libertarias-porque-las-mujeres-no-debemos-olvidar/
Hola Lady_p!
EliminaGracias por participar! Te enlazo enseguida en la lista de participantes! Un abrazote!
Un relato estupendo. La verdad es que las mujeres han tenido un papel relevante a lo largo de la historia y han sido utilizadas en situaciones bélicas como mano de obra barata. Trabajadoras incansables sin reconocimiento de ningún tipo cuya labor fue decisiva. Muy buena aportación. Un abrazo!
ResponEliminalady_p
Hola de nuevo Lady_p!
EliminaComo tu bien dices la mujer siempre ha sido el personaje secundario de cualquier historia, dando igual el papel que desempeñara en cada caso, y quitándole importancia cuando la tenía. Un reconocimiento que llega tarde, pero como tu bien dices también en tu aportación, nunca hay que olvidar su papel en cada historia. Un abrazote!
Tal vez me haya desviado un poco del tema pero es una historia que me pareció digna de ser contada.
ResponEliminahttps://eldemiurgodehurlingham.blogspot.com/2025/05/este-jueves-un-relato-mujeres-en-guerra.html
Besos.
Hola Demi!!
EliminaYa estaba echando de menos tu relato! Lo enlazo ahora mismo en la lista de participantes! Gracias por apuntarte a este reto! Un abrazote!
Es curioso que enfermarse en forma tan notoria le haya salvado, al no poder estar en el día de la explosión. Aunque haya tenido que trabajar al día siguiente, como si nada hubiera pasado.
ResponEliminaBesos.
Hola de nuevo Demi!
EliminaEl componente del azar siempre está ligado de alguna forma a nuestras vidas, no todo depende de las decisiones conscientes que tomamos, a veces un golpe de buena o mala suerte puede ser decisivo! Un abrazote!
Y el mundo se dio cuenta como era antes de la guerra, lo que valían cada uno de los que ahora además , ponían el pecho para defender su patria, nadie les preguntó si querían , ni si era o no más peligroso que permanecer en casa. triste realidad, lo que debe pasar el mundo para reconocer sin medallas lo que fue una guerra.
ResponEliminaEfectivamente Gustab! Precisamente los que no deciden nada en las guerras son los que les toca luchar, sufrir y morir en ellas! Más viejo que el mundo! Un abrazote!
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