Para este mes de Noviembre, los amigos de EL TINTERO DE ORO nos proponen el siguiente microreto desde su blog:
Consistirá en escribir un microrrelato en el que el entorno refleje las emociones del personaje. Es decir, el factor en el que vamos a centrarnos es el estado de ánimo del personaje. Por ejemplo: Personaje triste en un paisaje nublado y lluvioso, Personaje alegre en un lugar muy soleado, Personaje asustado en un sitio terrorífico, etc.
La idea es profundizar en las emociones del personaje también a través de su entorno, creando así otra dimensión más. Por supuesto, el género del microrrelato es libre y no podrá superar las 250 palabras.
"INVISIBLE"
Imagen: Pixabay
Siempre fui el rey de las discusiones. No había tema que se me resistiera, grande o pequeño, siempre tenía respuesta para todo. En alguna ocasión quizá me pasara de la raya y no respetara la opinión de los otros, incluso los desprecié descalificando sus comentarios, posiblemente más fundados que los míos.
Esa fue la razón de que muchos compañeros, amigos y familiares rehuyeran mi compañía, me evitan hace tiempo, ya no cuentan conmigo para salir y divertirnos. Reventé más de una cena por provocar una discusión repartiendo mis palabras ofensivas.
Hace un tiempo que siento algo extraño, tengo la sensación que cuando camino por la calle la gente no me ve. Se tropiezan conmigo si no me aparto de su camino. En los pasos de cebra, coches y peatones tampoco me ven. Incluso las puertas automáticas no me detectan, siempre me golpean al entrar justo delante de otra persona, nunca captan mi presencia.
En casa, ya puedo hablar largo y tendido de cualquier tema, que ella va arriba y abajo, tendiendo la lavadora, recogiéndola, cocinando, guardando la compra, no hay manera que me responda ni participe en la conversación. Imagino que no le interesa y mira que la provoco con los temas que la ponen nerviosa, no hay manera. Sale y entra de casa, para ir a comprar, con las amigas o al cine y nunca me pregunta si quiero venir. Tampoco me da ni un beso de buenas noches ni los buenos días. Definitivamente es como si fuera invisible.
A veces pasa que nuestro entorno es invisible y en él también hay humanos ...
ResponEliminaUn buen texto. Besotes
En ocasiones uno opta por ser invisible a los demás, pasar desapercibido, a veces lo necesitamos. Otra cosa distinta es que venga dado por nuestra actitud dañina hacia los demás, de esa no hay vuelta atrás! Un besote Campirela!
Eliminano hay mayor desprecio que no hacer aprecio. Bueno sí, la ignorancia.
ResponEliminaIgual es ya un fantasma y no se ha enterado como Brus gūilis.
Besazooo amiga
Yo creo que está cada vez más cerca de parecerse al amigo "Brus Güilis"! Je, je! Sin duda el desprecio a los demás y la ignoracia juntos son una combinación perfecta para quedarse solo! Un besote amigote!
EliminaUna historia muy original, Marifelita, con un personaje tan tóxico que acaba por quedarse aislado del mundo. Estupenda esa metáfora de la invisibilidad.
ResponEliminaLa toxicidad tiene estos efectos secundarios! Lo malo es que parece ser que cuando uno ya es consciente ya es demasiado tarde! Un abrazote Marta!
EliminaHola, Mariferlita. El protagonista quizás haya llegado al extremo de no importarle lo que digan los demás y como consecuencia los otros han llegado al mismo punto. Muy bien narrado.
ResponEliminaUn abrazo
Exacto! hay gente que no le importa absolutamente nada lo que piensen o digan los demás. Supongo que, como todo en la vida, en su justa medida puede estar bien, pero si te pasas igual ocurre lo que al protagonista. Aunque igual le da lo mismo, ves a saber... je je! Un abrazote Mirna!
Elimina¡Hola Marifelita! Nos traes una historia con una perspectiva muy original, narrada por su propio protagonista. Su entorno ha terminado por ignorarlo de tan cansino que era discutiendo. Muy bien retratada esa sensación de ser invisible para todo el mundo y no poder interactuar con nadie.
ResponEliminaUn saludo.
Gracias Rocío! El ser humano es sobretodo social. Si le quitas esa parte la vida puede ser muy triste y complicada, aunque a nuestro protagonista, que aun parece no haberse dado cuenta del todo de las consecuencias, quizá le de lo mismo! Je, je! Un abrazote!
EliminaHola, Marifelita.
ResponElimina¿No estará muerto?
Es verdad que hay personas tóxicas con una necesidad imperiosa por destacar y no les importa el cómo, solo actúan por propio egoísmo y si son crueles hasta se escudan en la sinceridad. Al final, tarde o temprano por mucho que te quieran terminarán por despreciarte.
Buen mensaje.
Un beso.
La crueldad, el egoísmo y la toxicidad en personas de nuestro entorno no nos conviene nada, sobre todo porque podemos invertir el tiempo con otras personas que nos hacen sentir bien, nos aprecian y nos lo hacen saber! Sin duda, si nadie te quiere ni te aprecia, estás más muerto que vivo! Un abrazote Irene!
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